Diagnostico Energético

 

El Diagnóstico Energético de una instalación representa un salto importante respecto al prediagnóstivo energético. Este trabajo está centrado en los principales equipos de consumo y en él se analizan las mejoras con gran precisión gracias a un importante trabajo en campo. Básicamente, su principal diferencia respecto a la Auditoría Energética está en el porcentaje de equipos y consumos analizados. Este trabajo está centrado en el análisis de en torno al 60-70 % del total de los equipos de consumo de una instalación o proceso, mientras que la auditoría cubre la totalidad de consumos.

Dado que la intensidad de los análisis es la misma que la de una auditoría, se recopilan los mismos datos, pero su análisis y conclusiones se centra solo en ese porcentaje objetivo. El informe y conclusiones contendrán también:

 

  • Mapa de energía. por centro de consumo y proceso.
  • Ratios energéticos actuales o Índices de desempeño energético  (IDENs)
  • MAEs. Medidas ahorro energético detectadas en equipos, procesos y de gestión (con y sin inversión).
  • Valoración y requisitos técnicos para la implantación de un SGE adaptado al cliente.
  • Plan de Acción. Viabilidad técnico-económica medidas, inversión y retorno (simple y en ciclo de vida).
  • Propuesta de implantación. Cronograma y plazo de ejecución mejoras según su importancia

 

Informe y presentación de resultados

Tras la solicitud y análisis de la información previa se planifica la toma de datos en campo, cuya duración dependerá de la dimensión del proyecto (desde una a varias semanas), posteriormente se tratará toda la información recogida para la elaboración de propuestas y presentación de informes en las instalaciones del cliente.